El célebre escritor peruano Mario Vargas Llosa tendrá un nuevo trabajo publicado este año. Se trata de Le dedico mi silencio, una novela que saldrá a la venta en octubre y mostrará su amor por su país natal, su escena musical y la escritura.
Le dedico mi silencio nos sitúa en los años 90 para contar la historia de Toño Azpilcueta, un experto en música criolla que conoce a Lalo Molfino, un prodigioso guitarrista. Azpilcueta ve en él todo lo que disfruta de este arte: su amor los valses, marineras, polkas y huaynos peruanos, que, en sus manos, encuentran su importancia social. Con él muestran las señas de identidad del país, lo que derriba prejuicios y barreras raciales, lo que lo sume en el sentimiento de fraternidad. En otras palabras, lo unifica en la época de plena actividad de los ataques del grupo terrorista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru y de los guerrilleros comunistas de Sendero Luminoso, cuya actividad no cesaría hasta 1997 y 2001, respectivamente.
La fascinación que el protagonista siente por el guitarrista -que resume con la cualidad huachafería, un sinónimo propio de Perú para cursilería y que es en su opinión la mayor aportación de Perú al mundo- le llevará a investigar acerca de sus orígenes y a escribir un libro acerca de él.
Es así como Le dedico mi silencio se convierte en un relato de ficción con elementos de ensayo nacido a partir de la agridulce realidad del país sudamericano, lo que establece cierto paralelismos con la novela gráfica Dispararon al pianista y su posterior adaptación al cine. De acuerdo con Llosa, con esta novela «agradezco un secreto amor que me ha acompañado toda la vida: el que siento por la música criolla y, en especial, por el vals de mi país». También es su primera obra tras Tiempos recios, publicada en 2019. El autor, de 87 años, vuelve tras un parón de cuatro años.
Cabe destacar que, en parte, su lugar destacado en España también se debe a su vida privada, desde vivir en nuestro país por muchos años y hacer de Madrid su residencia principal en estos últimos años hasta su relación con Isabel Preysler. En las últimas semanas ha sido un titular negativo el que ha llenado los medios: su ingreso por COVID en el hospital, por el que ya fue hospitalizado en 2022. Afortunadamente, ya ha recibido el alta.
Sin embargo, su vida personal no es sino un motivo más para la fama para el gran público, al menos a juzgar por su extensa lista de reconocimientos. Ha recibido importantes distinciones de importancia internacional, como pueden ser el Príncipe de Asturias en 1986, el Premio Cervantes en 1995 o el Premio Nobel en 2010. También es miembro de la RAE y, en Francia, de la Legión de Honor y la Academia Francesa.
Su último trabajo es una posible muestra de este ingenio por el que ha conseguido una recepción tan positiva a lo largo de los años, que estará a la venta de forma simultánea en todos los países de habla hispana. En el caso de España, gracias a Alfaguara. Independientemente de la editorial, los lectores podrán leer su último trabajo desde el 26 de octubre.