El ciclo sin fin de Ecopixel

Ecopixel es una empresa que fabrica productos a partir del reciclaje de plástico homopolímero, elaborado de material totalmente triturado. Recoge, separa, tritura en pedazos y vuelve a transformar en productos lo que otros tiran. Una manera original y sostenible de crear un ciclo de vida para algunos materiales mucho más largo del que se preveía para ellos.

Materialización del reciclaje. Ecopixel consigue llevar a la práctica una acción tan importante en la actualidad como darle forma a materiales ya antes utilizados creando con ellos nuevos productos. Su reciclaje se centra en el plástico homopolímero, el cual se suele fabricar con material de desecho termoplástico industrial, aunque cada vez se están incluyendo más materiales recolectados que cualquier campo.

Delta stools mix
Delta stools mix

Para muchos, la palabra homopolímero es un concepto nuevo, desconocido hasta ahora. El factor positivo de este tipo de plástico, y por lo que Ecopixel lo emplea, es que se puede fundir una y otra vez, todas las veces que se desee, así que tenemos ante nosotros un material que crea un verdadero ciclo. Eso sí, para que pueda seguir transformándose de forma infinita, el material tiene que mantenerse limpio.

Si se mantienen separados los polímeros, entonces el material podrá ser usado por muchas más personas, lo que contribuye a evitar la extracción de materias primas. Ecopixel, por esta razón, también busca concienciar de la importancia de no mezclar desechos de plástico diferentes para mantenerlos limpios y con capacidad de poder ser reutilizados.

La empresa, además de producir productos para otras empresas, también promueve sus propios diseños. Gracias a la producción pre presurizada y a la versión maxi-flake, la apariencia del plástico reciclado es pixelado de manera aleatoria pero donde se puede controlar el color que adquiere ese objeto. Dado que la temperatura de fusión es baja, la calidad del material no sufre variaciones, así que podríamos decir que se acerca a lo que sería un «ciclo verdadero».

Ese resultado a base de píxeles hace que Ecopixel sea fácilmente reconocible, además de dotar a cada producto con la característica de ser único, puesto que no van a haber dos objetos iguales. Dicho esto, hay que destacar su proceso de trabajo, en el cual se implican de principio a fin, ya que gestionan el seguimiento técnico del dibujo de su proyecto hasta la fabricación de las herramientas hasta la producción final, con la posibilidad de organizar el embalaje y el transporte.

El proyecto de Ecopixel lleva activo desde 2017, centrándose sobre todo en los materiales plásticos reciclados utilizados en los campos del diseño y la arquitectura interna. En su búsqueda constante de nuevos materiales, la empresa desarrolló una nueva gama de materiales basada en un concepto de múltiples capas que posibilita la creación de un único material.

APEX
APEX

Debido a que se pueden variar las densidades de las diferentes capas, así es como descubrieron que una capa interior suave de forma tosca y una exterior más rígida y densa conseguía el efecto de alta absorción del sonido. Demostró ser perfecto para las cajas de altavoces. Así se presenta Ghetto Blaster, un altavoz estéreo Bluetooth con ventilación de alta calidad que ofrece un sonido de alta calidad en un elegante sistema de altavoces portátiles para el hogar.

Entre otros muchos objetos creados por Ecopixel, también se encuentra una bandeja de mesa con florero integrado que recibe el nombre Apex. Su particularidad radica en mostrar de forma artística, representando la naturaleza, el interior fundido del material. Lo que se pretende transmitir con esta creación es que, después de que se destruya el paisaje, acaban naciendo nuevas plantas y flores.

Si no fuera poco, Ecopixel también se ha embarcado en un proyecto de concienciación con escuelas de su zona, en Italia. La iniciativa consiste en que los niños recojan los tapones de las botellas para que, posteriormente, ese plástico se transforme en un objeto que ellos mismos vayan a emplear en el colegio. Una manera práctica de demostrar que el reciclaje sirve para algo y de que las nuevas generaciones implementen en su rutina conductas responsables con el planeta.