Chanel y la danza, una unión que muestra el movimiento de la libertad con un toque efímero
Chanel siempre tuvo claro que la danza era una metáfora y un movimiento de libertad, un lenguaje y una expresión de belleza. Gabrielle Chanel se inclinó hacia la precisión y el movimiento a la hora de diseñar los trajes. Durante su vida, Chanel colaboró con grandes artistas y coreógrafos de los que aprendió y aprendieron en este mundo.
Junto al amor de su vida, Boy Capel, vio la obra de El Rito de la Primavera que supuso un papel decisivo en su vida y la cual fue en índice para desarrollar su vida y volcarse en este ámbito. Además, esta obra, supuso una descarga eléctrica estética para Gabrielle, que quedó cautivada, poco a poco fue conociendo a más artistas vanguardistas que marcarían parte de su futuro. De todas estas fusiones surgiría un arte completo que uniría la música, la danza y las artes visuales que le dieron sentido al ballet.
En 1924 centrada en la comodidad y libertad de movimiento, puso su atrevimiento y visión al servicio de la danza mediante el vestuario. Chanel creó trajes contemporáneos que podían usarse en la vida real para cualquier ocasión, era un paso para acercar la moda a la calle.
Fue gracias a Diaghilev que la moda y la danza se unieran, sus bailes Russes basados en el movimiento y lo efímero ha dejado huella en numerosas colecciones convirtiéndose estas dos vertientes en algo inseparable en la maison.
Por otro lado, Chanel es el socio oficial de la ceremonia de los premios Nijinsky en Mónaco desde el año 2000 y en 2018 fue mecenas de la gala de apertura de la temporada de baile de la Ópera de París. En 2021 la maison reafirmará su apoyo a esta institución, esta unión tiene como objetivo apoyar todos los proyectos artísticos de ópera, sellando así la estrecha relación entre ambas casas, basadas en la experiencia y la creación.
La Gala de apertura de la temporada de danza 2021 de la Ópera Nacional de París, El ballet “grand pas classique”
Chanel colabora con el mundo de la danza para mostrar, así, su apoyo. Se celebró una gala sin público y adaptada a las medidas del COVID-19, pero que no perdió su esencia. El vestuario fue creado por Chanel bajo la dirección de Virginie Viard, directora artística de colecciones de moda. La silueta femenina compuesta por un corpiño en terciopelo de seda azul noche y un tutú rígido en tul negro que fue, expresamente impreso, con una tonalidad en azul profundo y bordado con una constelación de lentejuelas abalorios y strass que evocan el encanto del cielo entrellado, bordados delicadamente a mano de los talleres de la casa Lasage.
A su vez, la silueta masculina era un jubón de terciopelo bordado. Dos trajes de ensueño que renueva la magia atemporal de este ballet excepcional.
Ballet "Chorégraphes contemporáneos - Créer aujourd'hui" - "Exposición" de Sidi Larbi Cherkaoui
Chanel se convierte en la patrona del Ballet de la Ópera de París, protagonista de este evento pues la maison ha diseñado y elaborado el vestuario bajo la dirección de Virginia Viard.
En un ambiente blanco y negro con una atmosfera que recuerda a un estudio fotográfico de los años 80 que se mimetiza con la filosofía de esta colección. Una colección inspirada en los icónicos colores de la maison, sus colores representativos por excelencia y que serán los protagonistas de este evento. Con toques fluidos y puros para enfatizar cada gesto, además, se retracta la gráfica raya negra. Por otro lado, se adornan las prendas con complementos al ritmo de los movimientos. El cuello, las perlas o una chaqueta serán los protagonistas que marcaran los movimientos.
Un vestuario que reflejan la comodidad y libertad de movimiento tan buscada por Gabrielle Chanel y que, años más tarde, vuelve a ser protagonista de un evento donde esta presenta el baile.
Un evento con historia, esencia e inspirado en los inicios de la moda y la danza.