Vivimos en una sociedad en la que todo parece consumible y desechable. Cambiar estas lógicas está en nuestras manos y Lush Cosmetics pone de su parte.
Fruto de la asociación entre Lush y Ethical Consumer, se celebra desde 2012 el galardón internacional Lush Prize. Su objetivo es apoyar las pruebas de toxicología sin animales, recompensando a los grupos que trabajan en el campo de la investigación científica cruelty-free.
Desde 2007, el Charity Pot by Lush ha sido un verdadero éxito. Cada 10 segundos se vende un bote y ya se han repartido más de 58 millones de euros a organizaciones de protección animal, defensa de los derechos humanos y conservación del medioambiente.
Ahora lanzan un nuevo formato, la versión Pot Coin, sólida, vegana y libre de envases. A pesar de su reducido tamaño, estas pastillitas están repletas de ingredientes obtenidos a través de agroecología y permacultura, y tienen una historia de comercio justo y regeneración detrás.
Los 21 compuestos, en su mayoría naturales, contienen propiedades activas, gracias a las vitaminas, minerales y enzimas. La acción de la manteca de karité, el aceite de oliva y de jojoba hacen esta crema ultra nutritiva e hidratante.
Además del gel fresco de aloe fresco calmante de Kenia, las coins llevan un cacao orgánico que proporciona una textura fundente que no solo cuida la piel, sino también a los productores de las materias primas. Cada céntimo marca la diferencia.
Su modo de uso es peculiar: una vez derritas las monedas con calor corporal, extiende la manteca directamente en la piel para obtener la hidratación.
Gran número de sus productos son auto-conservantes y todos son aptos para vegetarianos y veganos. Ahora presentan un concentrado de dulzura disponible en una versión sólida, bajo el nombre de Charity Pot Coin.Proporciona una piel suave por un mundo mejor.