Los autorretratos de
Natalya Nova
Parece que en la cultura post-internet la realización del individuo pasa por definir la identidad. La preocupación por la autorreferencia ha crecido con las redes sociales, con toda clase de personajes haciéndose selfies, que son, en esencia, autorretratos de una época post-millenial.
Natalya Nova es más tradicional en el aspecto técnico, utiliza una Leica de formato medio con lentes clásicas de los años 30 y 40 para crear sus autorretratos. A pesar de que dentro de su extensa obra hay diversidad temática, se suele tomar a sí misma como modelo para estudiar las expresiones fisionómicas y los efectos de las luces y las sombras. El resultado es la expresión íntima de vida, las fotos podrían ser un indicio del concepto de sí misma, siempre mágico y provocativo.
Nacida en Orenburg (Rusia), pero con sede en la ciudad de Nueva York, Natalya es una artista, fotógrafa y cineasta interesada en sacar el mayor partido posible a la textura y la calidad de los pigmentos a través de la iluminación. Su trabajo ha sido exhibido en Miami Art Basel, varios festivales de cine y galerías de Nueva York. Nos cuenta algo más acerca de las técnicas que adopta, en un estilo personalísimo, lleno de matices.
¿Cómo definirías tu profesión?
Soy artista: fotógrafa, pintora, cineasta, escritora.
¿En qué expresión artística te sientes más cómoda?
Parece que toda mi vida, sin importar a dónde fuera, miré el mundo a través del lente de mi cámara. No llamaría a la fotografía un trabajo, es una parte inseparable de mí. Escribir, por otro lado, es nuevo, pero se siente inspirado e imposible de resistir.
¿Cuándo empezaste en el ámbito?
Me gradué del Centro Internacional de Fotografía en 2012.
¿Qué es lo que mas te inspira?
Me inspira cualquier cosa que provoque una auténtica emoción y me conmueven las obras de Tamara de Lempicka, Jean-Michel Basquiat, Salvador Dali, Pierre Molinier, Man Ray, Zao Wou-Ki, Federico Fellini; de los que están vivos hoy: Yayoi Kusama, Damien Hirst, Edoardo Tresoldi, Takashi Miike y Wong Kar-Wai, entre otros.
¿Es el arte emoji un nuevo tipo de expresión ?
«Emoji Art» es una de mis últimas series, de 2019. Mi inspiración vino de la portada del libro «The Hero With A Thousand Faces» de Joseph Campbell. Representa el rostro de Jesús hecho con pequeños retratos de personas de diferentes razas y religiones. El concepto de imagen dentro de la imagen siempre me ha fascinado.
Te gusta representarte a ti misma. ¿Podrías contarme más sobre cómo haces los diferentes autorretratos? ¿Estás tratando de mostrar una parte de ti o tal y cómo te ves?
Mis autorretratos son una proyección de mi voz interior. Lo que puede parecerle abstracto al espectador es para mí un lenguaje enraizado en el simbolismo, la alegoría y la música. Estoy fotografiando a mi yo soñada.
¿Perdiste inspiración durante la cuarentena?
No lo hice. Este año ciertamente fue dolorosamente transformador. Sin embargo, en mi carrera artística, ha sido el más exitoso hasta ahora.
Mi serie «Dreaming Rodin» ganó una mención de honor en los International Photography Awards en la categoría Professional Fine Art Nudes. También estoy en proceso de escribir una novela.
¿Cómo es tu proceso creativo?
Heinrich Zimmer dijo una vez: «Las mejores cosas no se pueden decir, las segundas mejores se malinterpretan, las terceras mejores son de lo que hablamos».
El proceso creativo está en la categoría de «las mejores cosas que no se pueden decir», un vórtice inexplicable de la existencia, la sintonía con el enfoque final, la alineación perfecta, la nota musical de un orgasmo; es ansioso y divino.
¿Tiene exposiciones actuales? ¿Y proyectos futuros?
Desafortunadamente y debido al coronavirus, todos los eventos de 2020 fueron pospuestos o cancelados.
¿Cómo te ves dentro de unos años?
Me veo escribiendo y dirigiendo una serie de televisión que se convierta en un gran éxito.