«Hilando» el discurso textil donde Mariana Palalan mantiene con vida el pulso de cada tejido
Hilando creación de Mariana Palalan es proyecto de reciclaje de prendas para no dejarlas morir. Una forma de creación, confección, y conocimiento, donde a partir de las prendas del pasado, Mariana da una segunda, tercera o cuarta vida.
¿Qué es Hilando?
Hilando es un proyecto de vida y yo creo que acabará cuando yo desaparezca. Esta focalizado en la costura, no solo en la confección o elaboración de trajes que alguien puede considerar útiles. También cuenta historias donde las palabras no son suficiente. Lo visual; los ojos, si conseguimos hablar con los ojos ahorras conversación. La estética, lo que se ve y entra por los ojos crea un nuevo lenguaje. Hilando no es hacer ropa. Es más bien el uso y utilidad del tejido para contar algo. No se limita a la superficie. Si indagas en las piezas, no son solo ropa. Hay también monstruos y seres de mi cabeza no funcionales para la vida, sino para los sueños.
¿Dónde se fragua Hilando como concepto?
Nace durante mi primer año de universidad en la Universidad Politécnica de Madrid. En mi grado, Corte Confección y Diseño de moda, curse Ecodiseño, que me llevó a cuestionarme por que únicamente se creaba ropa de cero, si ya hay mucha ropa creada, que nadie usa. Profundizando es ello, por qué no darle otra vida. Me importaba mucho eso, y el hecho de que la ropa, mejor dicho, la tela se pudiera transformar. Si a las cosas les damos otra utilidad, las limpiamos y las cuidamos… Pueden tener otra utilidad. Al fin y al cabo, la costura es deshacer y hacer, puedes hacerlo tantas veces como quieras, mil veces. No es hacer un edificio. La costura permite mucha independencia a la hora de crear. Eso sí, te la puedes cargar, ir para delante o atrás.
¿Entonces Hilando es tu habilidad de resucitar la tela?
Sí, de algún modo sí. Una falda que ya no me pongo puede pasar a ser un pantalón. Con mis manos uno telas y creo. Siempre partiendo de ropa ya existente. A medida que fui creciendo y creándome una identidad, me empezaron a llegar telas, cortinas, manteles… Eso me hizo centrarme más en tejidos.
Si tu deshaces un pantalón, tienes tela, es forma. Y yo hago formas cuando uno tejidos capaces de crear. Todos mis trabajos los enfoque en ellos. Hilando partió como mi TFG, ya tenía práctica, vendía. Todas las semanas me iba a vender a mercadillos, y la gente me encontraba por el boca a boca de conocidos o redes sociales.
¿Cómo trabajas la tela?
Tengo dos maneras. Interviniendo una prenda sin modificar la forma. O bien deshaciendo prendas y uniéndolas a través de patchwork; un tejido muy grande a partir del cual creo otra prenda. No puedo hacer dos piezas iguales, jamás lo haría. A pesar de usar una misma tela es muy importante que cada pieza sea única.
Cada pieza cuenta algo diferente a la otra porque viene de distintos tejidos dentro de un tejido mayor. Es la unión de miles de tejidos donde cada uno, tiene su propia historia. Yo, de alguna manera, siento que creo y cuento historias a raíz de tejidos con mucho valor por la connotación simbólica que albergan.
Mis amigos muchas veces me dan cosas, y disfruto cuando ellos se reconocen en mis creaciones, lo que un día fue suyo ahora pasa a ser de otro. Les tengo muy en cuenta en el proceso. Como que me gusta pensar que lo que un día me dio alguien ha tomado otra forma. Para mí, es una manera muy bonita de mantener a las personas, o sea, a través del textil.
Son tesoros que cada uno hace propios. Para ti puede ser un tesoro algo que para otra persona es basura. Eso me gusta mucho y ahora, pues voy a hacerlo con un objetivo. Mi propuesta para este año es sacar dos colecciones (primavera e invierno). Y a partir de ahí, sacar alguna que otra cosa, y seguir con las clases.
¿También das clases?
Si, siempre lo he dicho, en Hilando yo no solo hago ropa. Creo historia y ayudo a crearlas, en ellas participan los tejidos, la gente, y los seres de mi cabeza. Es un proyecto social en muchos sentidos, en mi taller viene la gente y aprende de mí, y yo aprendo de ellos. Me encanta enseñar y enseñar que al final tú puedes vestir de la forma que quieras y con tu ropa puedes hacer las formas que quieras. Me gustaría que la gente tuviera las herramientas para revivir los tejidos.
La gente viene con su proyecto, y yo les enseño la forma. Si te equivocas, pruebas y al final encuentras tu técnica. Suelo darles dos o tres maneras de hacerlo y llegar a un mismo lugar. Sin embargo, valoro más la evolución del proceso, la experimentación, que el resultado final.
¿Qué puertas te ha abierto Hilando?
Poder coser con más gente y colaborar. Por ejemplo, hace cuatro años, Clara García y yo decidimos empezar a coser juntas, al ser Hilando un proyecto tan personal, se creó un nuevo camino para las dos. Así nació Las Bambulas. Atendíamos peticiones concretas de la gente, en cuanto formas y telas. Principalmente hacíamos vestuario para conciertos y videoclips. Trabajamos con Jorge Drexler y King África, y otra tantísima gente menos conocida, pero que para mí sí lo son. Gente que simplemente necesitaba algo de nosotras.
Pero siempre me he mantenido en mi esencia de Hilando a la que vuelvo más que nunca este año, para confeccionar desde ahí los pedidos y encargos de la gente. Trabajo mucho en conjunto con Aatropicana (Alicia Alonso), hemos realizado dos desfiles juntas, uno en Matadero y otro a principios de Año en Valencia.
https://whitepaperby.com/to-be-continued/¿Hacia dónde miras al pensar en el futuro de Hilando?
Este último año he re-estudiando el patronaje. Me parece muy importante seguir aprendiendo. Hoy, siento que he regresado a mi técnica. Me veo capaz de hacer cualquier cosa, literalmente cualquier cosa, desde fundas de sofás, cortinas, a vestidos, pantalones, seres. Tras un periodo tan versátil y estar en todos lados, probando muchas cosas, siento que bueno, que quiero volver a Hilando e intentarlo al menos o saber si puedo, hacer dos ventas, generar colecciones y trasportarlas a un lugar más. Crear algo más sólido.
¿Es para ti la sostenibilidad un factor determinante a la hora de crear?
Espero que la sostenibilidad no sea una moda, sino algo que se quede. Las cosas que nos ayudan y ayudan a nuestro mundo, como es la sostenibilidad, no debería ser lo bonito, ni lo atractivo. Hay que ir más allá, ¿vas a limitarte a vestir petróleo? No me vale, hay modas que se tienen que quedar y dejar de ser moda para convertirse en un comportamiento estructurado.
