El videoartista Gabe BC diseña cápsulas del tiempo para plantear preguntas sobre el futuro de nuestras huellas digitales.
Es curioso observar que, en la sociedad actual, donde los reels y las historias lo inundan todo, pocos paran a preguntarse acerca de los fragmentos de sentido que se desprenden de nosotros para perderse en la inmensidad de la red. Queremos ser reconocidos y recordados, pero solo por lo que transmitimos y coleccionamos en nuestras memorias online.
Como “alguien que creció haciendo arte en un Macintosh en lugar de en un lienzo”, el artista de medios mixtos, Gabe Barcia-Colombo, juega a coleccionar estos recuerdos para explorar metafóricamente el nuevo paradigma comunicativo tecnológico y la evolución de nuestra identidad en él. ¿Cómo podemos crear nuevos monumentos digitales para la preservación de nuestro yo físico? Además de crear frasquitos con personas atrapadas en su interior, proyecciones a gran escala, performances inmersivas o incluso máquinas expendedoras de ADN real, participa frecuentemente en seminarios universitarios y charlas para dar respuesta a esta pregunta y exponer su visión del futuro, como explica, no siempre bien recibida: “En 2016 casi me expulsan de una mesa redonda por afirmar que las obras de arte digitales se iban a poder conservar, archivar y presentar a lo largo del tiempo”.
Ahora es una realidad ¿Llegará todo el arte a ser digital?
No creo que llegue a ser puramente digital. Llevo años diciendo que el arte digital se coleccionará, comerciará y venderá tanto como las obras de arte físicas tradicionales, pero creo que ha hecho falta una pandemia mundial para que la gente vea el verdadero valor de las interacciones y las obras de arte digitales.
Es increíble cómo las cosas cambian tan rápido. Pero sigo queriendo ver escultura física, pintura y performances en persona. Creo que hay espacio para todo.
Como en tu caso ¿con cuántos tipos de medios trabajas?
Vídeo, animación, arcilla, vidrio, pantallas, ADN humano.
¿Aprendiste de forma autodidacta?
Empecé a hacer vídeos cuando tenía unos 10 años. Mi familia tenía una cámara VHS así que hacía películas raras con mi hermana o mis amigos. Hice películas sobre extraterrestres, momias y piratas. Con el tiempo fui a la escuela de cine y querían que hiciera películas al estilo de Hollywood, pero no me interesaba tanto el oficio de hacer películas. Me interesaban más las cosas raras que se pueden hacer con el videoarte, así que lo dejé y empecé a hacer videoarte.
Una de tus primeras piezas fue Animalia Chordata ¿de dónde surgió la inspiración?
Hice esta videoescultura porque vi a todos mis amigos formando estas pequeñas botellas de sus vidas en Internet. Todo el mundo estaba creando una versión coleccionable de sí mismos y de sus amigos y recuerdos, así que quise hacer una colección física de mis amigos en frascos para representar lo que estaba ocurriendo en las redes sociales en ese momento. Como alguien que creció haciendo arte en un Macintosh en lugar de en un lienzo, mi trabajo siempre ha tratado sobre lo que la tecnología nos hace como sociedad, pero me gusta explorar esto metafórica o subrepticiamente a través del arte mediático basado en el tiempo.
¿Te consideras una persona nostálgica? Por los medios que utilizas, se podría decir que miras al futuro.
Sí, pienso mucho más en el futuro que en el pasado, así que no me llamaría nostálgico. Creo que todos estamos creando cápsulas del tiempo de nosotros mismos ahora mismo a través de los medios que coleccionamos y guardamos, pero nadie piensa en lo que pasará con estos medios dentro de 20 o 30 años. Con mi arte también estoy creando cápsulas de tiempo, pero estas cápsulas de tiempo están diseñadas para plantear preguntas sobre el futuro en lugar de simplemente reflejar el pasado.
¿Qué significado tendrá dejar nuestra huella digital para las próximas generaciones?
Últimamente he pensado mucho en esto. Creo que en el futuro todos querremos ser borrados de Internet.
Volviendo al presente… Hace poco recibido una beca de Arte y Tecnología del Museo de Arte del Condado de Los Ángeles, ¿para qué proyecto?
Es un proyecto llamado «The Hereafter Institute» sobre nuestra relación siempre cambiante con la muerte y la tecnología. The Hereafter Institute es una instalación artística inmersiva. Los especialistas realizan visitas guiadas sobre múltiples métodos de preservación digital, como el escaneo 3D del cuerpo, la memorialización vestible y la incrustación de datos personales en objetos cotidianos. El objetivo es ayudar a honrar, reconocer y celebrar la presencia digital y considerar el futuro de los rituales y memoriales en torno a la abundancia de datos personales. ¿Cómo podemos crear nuevos monumentos digitales para la preservación de nuestro yo físico?
La respuesta podría estar en la plataforma que creaste, Bunker.nyc
Creé Bunker para exponer obras de artistas comprometidos con la creación de nuevos trabajos sobre el impacto de la tecnología en nuestra vida cotidiana. Esto fue en 2017, cuando el mundo del arte tradicional no estaba muy interesado en el arte de los medios digitales, al menos ni de lejos como se han convertido de repente en el último año.