Y así fue como pétalo a pétalo consiguió que su vida cambiase para siempre viendo arte en esas misma flores que le acompañaban cada día y, a su vez, regándolo con música. Pues la belleza de su trabajo se encuentra entre las flores y la música, una combinación que resulta de lo más original y en algunas ocasiones, te deja un tanto “helado”. 

Un trabajo que genera todo tipo de opiniones pero que nunca defrauda. Un aire fresco e innovador para poder apreciar la belleza, aún más, de las flores, de la naturaleza, de la vida, se trata de ir más allá de una forma inconsciente

Fue en 2002 cuando Makoto fue sembrando sus propias semillas y expresando a través del arte lo que sentía, convirtiéndose así, en un innovador en el mercado y haciéndose un hueco a nivel internacional. 

Este hecho cambió completamente su vida, se convertiría así en un referente en lo que denomina: arte floral. 

Su filosofía y combinación de las flores con la música han hecho que en algunas ocasiones deje a su público un tanto helado. 

Reconoce que desde hace un tiempo las flores era una de sus pasiones, estar rodeado de seres vivos era, sin ninguna duda, algo que vivía intensamente. Explorar la naturaleza y viajar a través de ella para así, crear sus obras. 

Y es esa misma naturaleza la que día a día le inspira para crear nuevas aventuras e innovar en un mundo un tanto desconocido. 

Y es así, por lo que Makoto afirma que su trabajo no solo consiste en la creación de las obras si no, también, en darle una nueva vida a cada una de las flores, cuando las tiene sobre sus manos, afirma, «es algo sagrado».

Con Makoto, la flor nunca muere, renace, comienzan una nueva vida plasmada en arte.

Pero sin duda, si hay algo que el artista tiene presente es, el recuerdo en el corazón. Recuerda todas y cada una de las flores, pues como nos comenta: «mi trabajo surge de quitar la vida».

En los últimos años las nuevas formas de vida han hecho que se deje de apreciar el valor de la naturaleza. La misión de muchos artistas es ser capaces de volver a saber apreciar ese valor, ser capaces de interpretar. La naturaleza ha dejado de ser algo fundamental. 

Por ello, Makoto mediante la creación de sus obras es capaz de darle un nuevo aire, algunas veces un tanto helado pero nunca sin dejar atrás la esencia de la naturaleza. Unir al humano con la naturaleza, para dar paso a la vida.

Makoto no solo desarrolla su arte floral en exposiciones, también se puede apreciar en la calle. La moda está íntimamente unida al artista y así lo demuestra, realizando arreglos florales para firmas tan brillantes y referentes como: Hérmes, Dior o Fendi.