«Schoonheid» es una palabra holandesa con dos significados: «belleza», que proviene de la creatividad; y «limpio», que proviene del aire limpio y la energía limpia. A modo de mantra, el studio Roosegaarde quiere instaurar estas condiciones como fundamentales de la vida diaria y por eso han creado distintos paisajes oníricos que representan la habitabilidad de nuestros paisajes futuros.
En el laboratorio de diseño social de Daan Roosegaarde la luz es su idioma. Este artista comparte con frecuencia sus ideas visionarias en conferencias por todo el mundo, incluyendo charlas TED y de la NASA.
Junto a su equipo de diseñadores e ingenieros, tratan de conectar personas y tecnología mediante obras de arte que mejoran la vida diaria en entornos urbanos, despiertan la imaginación y luchan contra la crisis climática. Se preguntan y tratan de dar respuesta a asuntos en los que pocas personas se implican: ¿Cómo puede el diseño de iluminación de vanguardia ayudar a las plantas a crecer de manera más sostenible? ¿Cómo podemos hacer del granjero el héroe?
Las obras de este innovador estudio holandés han sido internacionalmente aclamadas. Waterlight es una inundación virtual que muestra el poder del agua, mientras que Smog free Project es el primer purificador de aire exterior más grande del mundo que convierte el smog en joyas. Smart Highway es un proyecto de carreteras que se cargan durante el día y brillan por la noche y Space Waste Lab nos permite visualizar y reciclar residuos espaciales. Como novedad, han creado el primer Urban Sun del mundo que limpia el coronavirus en espacios públicos.
En su reciente libro publicado por Phaidon, Daan Roosegaarde dice que: «La gente no cambiará debido a hechos o números. Pero si podemos activar la imaginación de un nuevo mundo, esa es la forma de activar a las personas. No creo en la utopía, pero en protopia; paso a paso mejorando el mundo que nos rodea. El arte es nuestro activador «.
El estudio está ubicado en una antigua fábrica de vidrio en el puerto de Rotterdam NL, también conocida como Dream Factory. Allí desarrollan desde el concepto hasta las creación de las instalaciones artísticas, contando con una vasta experiencia en encargos de espacios públicos de ciudades como Rotterdam, Beijing, París, Eindhoven y Estocolmo. También han iniciado sus propios proyectos para investigar innovaciones sociales en colaboración con universidades o asociaciones con la NASA y BMW, y tiene un estudio emergente en Shanghai.
Studio Roosegaarde: los proyectos
La mayoría de las veces apenas percibimos las grandes áreas de la Tierra que literalmente nos alimentan así que la nueva creación de Daan ha sido Grow, un paisaje de 20.000m2 con el que quiere ensalzar la belleza de la agricultura y destacar la importancia de la innovación en el sistema agrícola. Un paisaje luminoso de ensueño formado por ondas de luz rojas y azules sobre un enorme campo de cultivo de puerro, inspirado en La luz poéticade la fotobiología.
Se ha demostrado que ciertas recetas de luz azul, roja y ultravioleta mejoran el crecimiento y la resistencia de las plantas, de ahí su nombre. Daan Roosegaarde añade que : «muestra la belleza de la luz y la sostenibilidad. No como una utopía sino como una protopía, mejorando paso a paso».
Waterlicht también es un paisaje poético, pero en aquella ocasión el protagonista fue el agua. Como una inundación virtual, muestra hasta donde podría llegar el nivel del agua el impacto climático.
El proyecto es parte de Smart Highway, que son las carreteras interactivas y sostenibles del mañana de Daan Roosegaarde y Heijmans Infrastructure. Su objetivo es hacer carreteras inteligentes utilizando luz, energía e información que interactúen con la situación del tráfico. La colaboración entre Roosegaarde y Heijmans es un verdadero ejemplo de industria innovadora. El diseño y la interactividad de Studio Roosegaarde y la artesanía de Heijmans se fusionan en un objetivo común: la innovación del paisaje holandés.
El Studio Roosegaarde también se ha atrevido a colaborar con microorganismos vivos de 700 millones de años. Glowing nature también juega con las luces, y a través de esta experiencia interactiva añade luz con unos seres que brillan al tacto: las algas que más emiten esta energía en el mundo. Mientras los visitantes caminan por la instalación, la presión de sus pasos las despierta y su bioluminiscencia crea un entorno en constante cambio; la muestra de la naturaleza a través de un encuentro único entre biología y tecnología.
Pista de distoteca sostenible: Imagina la clásica pista de baile con azulejos LED de los setenta, pero ahora hazlo en un plano sostenible y para el diseño de un club en Rotterdam.
En esta pista de baile se genera electricidad a través de los movimientos . Y es empleada para alimentar la iluminación y la cabina de DJ. Para Daan Roosegaarde, la sostenibilidad se trata de hacer más, no menos. A través de Los hasta 25 vatios por módulo. Se crea un entorno abierto en el que los bailarines se involucran con la experiencia .