PAUL McCARTNEY
Los ojos de Paul
Por Pilar Gómez Rodríguez
Reabre sus puertas la National Portrait Gallery londinense y lo hace con una exposición de fotografías del archivo personal de Paul McCartney. Más de 250 instantáneas permiten husmear en la intimidad del mítico grupo y contemplar la beatlemanía desde el lado más desacostumbrado; desde dentro, desde el ojo del huracán.
“La verdad es que siempre me ha interesado la fotografía, desde que era muy pequeño. En casa había
una pequeña cámara de cajón en la década de los 50. Me encantaba el proceso entero de cargar un rollo de película Kodak en nuestra Brownie”, afirma Paul McCartney. Años después, el músico registraría también aquella época prodigiosa de mediados de los sesenta sin saber que lo era: primeros planos de
los fotógrafos que se acercaban demasiado, fans persiguiendo su coche mientras este intentaba avanzar o darles esquinazo, pero también otras escenas más íntimas, en las que John Lennon, Ringo Starr y George Harrison —así como el manager del grupo, Brian Epstein— aparecen concentrados en el backstage o en
momentos de relajación y risas. También el propio Paul McCartney se retrataba a sí mismo, explorando nuevas posibilidades fotográficas que hoy se pueden considerar protoselfies.
“Mirando ahora esas fotos, encuentro en ellas una especie de inocencia, de cuando todo era nuevo para nosotros. Traen tantas historias, tantos recuerdos… Es una de las muchas razones por las que las amo y sé que siempre me trasladarán allí, prendiendo mi imaginación. El hecho de que las haya elegido la National Portrait Gallery para su reapertura tras sus obras de renovación, lo digo humildemente, me asombra. Estoy deseando verlas expuestas colgadas en las paredes… sesenta años después”.
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