Una experiencia extremeña: Palacio de Arenales
El palacio de Arenales abre las puertas a un mundo de confort señorial
En medio de la planicie extremeña, adornada de olivos, perlada de ríos, condimentada con localizaciones romanas en pleno siglo XXI, a unos escasos kilómetros de Cáceres, se halla el palacio de Arenales, el antiguo hogar de la famosa familia Golfín. Teñido de blanco y crema, frecuentado por cigüeñas, el palacio se presenta para aquel que quiera descansar descubriendo el sol tras las persianas o despedirse de las alarmas de despertadores ruidosos y que no les dejan descansar. Fusión pastoril de aristocrática, medieval en sus andamios, en la planta de abajo se presenta una colección de arte único y una sala de armas.
Bajo el sol de Extremadura
Dentro hay habitaciones color crema, de muebles confortantes y habitaciones de varias gamas. Fuera hay campo con piscinas y campos de golf. Dentro hay un restaurante, Las Corchuelas, especializado en comida regional. Fuera hay paseo a caballo, los picnics y el sol. Todas las instalaciones y actividades están preparadas para hacerte sentir como un propietario señorial que puede decidir lo que es hoy y lo que será mañana, el que apunta con el dedo al museo Vostell Malpartida, hogar de artistas conceptuales, y se cumpla su deseo.
Sea dentro o sea fuera, a pie o por rutas de montaña en bicicleta, siempre cuente con el húmedo calor de un spa en el interior que te descargue las tensiones al recorrer su circuito hidrotermal y te relaje mediante tratamientos faciales, masajes y rituales regenerativos.
Si olvidar es lo que quieres, descansar es lo que tu cuerpo te pide, podrás volver la vista hacia Extremadura, pues el Palacio de Arenales y Hospes esperan tu llegada desde primavera con todas estas experiencias incluidas.
