Louis Vuitton y Passard recrean un invernadero culinario
Alain Passard emprende un viaje culinario con Louis Vuitton con destino a Corea. Lleva en el maletín sus tres estrellas Michelin y planea dejar el sello de su pasión por los vegetales en el nuevo restaurante temporal pop-up “Alain Passard at Louis Vuitton”.
Louis Vuitton Maison Seoul en Corea es el espacio escogido para el nuevo proyecto gastronómico “Alain Passard at Louis Vuitton” que estará abierto a partir del 17 de septiembre hasta el 19 de octubre. Passard combinará el éxito culinario de su restaurante “Arpège” de París, con la posibilidad de experimentar con productos coreanos. Para presentarlo en este lugar luminoso y decorado a modo jardín, haciendo alusión a su pasión por las hortalizas.
“Cuando llegué a Corea por primera vez, tuve la oportunidad de descubrir fascinantes productos locales, como verduras, pescados y mariscos. Espero que este restaurante pop-up pueda convertirse en una oportunidad para acercarme a la cultura coreana que tanto amo”, expresa Alain Passard.
Los huertos de Passard llegan a Corea
Passard es conocido por sus famosos huertos en diferentes zonas de Francia. Sus creaciones gastronómicas dependen de las estaciones porque utiliza productos que cultiva de manera artesanal. Introduce menús orientados al aprovechamiento de los vegetales, hierbas y frutas en la alta cocina, sacando el máximo provecho de sus formas, colores, sabores y aromas. Passard se planta en Corea un mes, para experimentar con productos locales y elaborar platos naturalistas que colmen todos los sentidos de los comensales. Plasmando su sello en el compromiso del consumo orgánico:
“Las ventanas curvadas de Louis Vuitton Maison Seoul me recuerda a los invernaderos que tenemos en nuestros jardines en Francia. Este restaurante pop-up será el lugar idóneo en el que descubrir los auténticos sabores de septiembre y octubre a través de productos frescos y camareros vestidos de jardineros.”
Un espacio para vivir el universo Louis Vuitton
La Louis Vuitton Maison Seoul ha servido para todo tipo de actividades culturales y artísticas, desde la creación de platos excepcionales o la muestra de piezas de colección de Objetos Nómadas de Vuitton; hasta la presentación de exposiciones de grandes nombres en el mundo del arte como Alberto Giacometti, Gerhard Richter o Andy Warhol.
Reúne todo aquello que explota los sentidos y sensaciones humanas en un edificio modernista de vidrio curvado que haciende al cielo con la intención de tocar las nubes. Un trabajo posmoderno del reconocido arquitecto contemporáneo Frank Gehry, su primera obra en Corea del Sur. En él supo mezclar el dinamismo que lo caracteriza, con los movimientos de líneas blancas en la danza tradicional coreana dongnae hakchum.
Tomó como inspiración los elementos tradicionales en la arquitectura coreana, como la Fortaleza Hwaseong del siglo XVIII; sin dejar de lado la estética de la Fundación Louis Vuitton con la que posee vínculo en materiales y formas. El interior, firmado por el arquitecto Peter Marino, converge con la fachada en cinco pisos de carácter particular que sigue el principio de la luz y el diseño ondulante.
Compromiso y placer
El primer restaurante temporal pop-up de Louis Vuitton abrió sus puertas en mayo, de la mano del cocinero francés Pierre Sang Boyer, de origen coreano. “Pierre Sang at Louis Vuitton” llevó a la Maison este concepto ofreciendo la posibilidad de hacer estos viajes al mundo culinario a través de la unión armoniosa de un entorno magnífico y el placer de la alta gastronomía.
Garantizando la calidad y su compromiso con la artesanía, Louis Vuitton plantea un mundo en el que mezcla sus intereses y pasiones. Desde 1854 se ha atrevido a innovar, de la mano de arquitectos, artistas, cocineros y diseñadores, en nuevas tendencias y disciplinas para ofrecer todo un estilo de vida asociado a la firma.
