¡Alucina, vecina! Dos meses llenos de conciertos y tardes de cine en La Casa Encendida, Madrid.

La Casa Encendida de Fundación Montemadrid presenta una nueva edición de La Terraza Magnética bajo el lema “¡Alucina, vecina!”. Un himno a las subculturas, a los sonidos y las voces de las periferias, y la música y el cine como propulsores de procesos colectivos y aglutinadores de comunidades. Una invitación a pasar tiempo juntos, a bailar y celebrar en Madrid durante julio y agosto.
La Terraza de La Casa Encendida es uno de los espacios más singulares que se pueden encontrar entre Lavapiés y Arganzuela, un jardín natural en una azotea con vistas y cafetería. Un lugar de paz en medio del ajetreo de la ciudad durante el día al que acuden numerosos estudiantes, profesionales y turistas y un animado punto de encuentro al caer la tarde.
Serán ocho sesiones de música en directo los viernes y de cine los sábados que quieren librar a los suburbios de los tópicos que los han definido para dar espacio a directores y músicos que han dibujado nuevas narrativas. Los viernes al atardecer, La Terraza Magnética se sumerge en ocho directos de la mano de artistas que reivindican sus raíces y luchan para crear comunidad a través de la música y el baile.
Conciertos julio
La edición se abrirá con Dinamarca, dj y productor chileno radicado en Suecia que ha revolucionado la pista de baile mezclando sonidos futuristas con ritmos y “flow latino”; un referente para la música de club que conecta escenas locales.
Simona, artista argentina residente en Barcelona, lucha contra los estereotipos y comparte en sus letras su experiencia de migrante en España.
Tras publicar en mayo del año pasado su primer EP Mimo, en La Terraza Magnética presentará su primer LP Esfera de amor, un disco donde se ve a una Simona más madura que retrata su nuevo camino como artista. Su estilo único le ha llevado a recorrer toda España, Argentina y México, tocando en festivales como Sónar, Festival B, BBK Live, Observatorio, Bahidora y Lollapalooza, y a colaborar con artistas como Lee Eye, Chico Blanco, Irene Garry, Broke Carrey, Anyi, Aww o Six Sex.
Desde Brasil llega Cashu, dj del colectivo Mamba Negra, una plataforma tanto musical como de lucha por la representación femenina, la libertad sexual y de género. El colectivo se forma en 2013 como una plataforma para la música en vivo y desde entonces se ha consolidado como una de las principales fiestas de música electrónica de São Paulo y se ha expandido para convertirse en un sello, agencia y emisora de radio.
Cashu ha tocado en más de 15 ciudades y ha participado en varios colectivos que trabajan para ocupar, descentralizar y hackear la escena nocturna brasileña. Ha actuado recientemente en Sónar con Badsista, en el festival Dekmantel de São Paulo, en Panorama Bar/Berghain, en el festival Red Bull Music Academy de São Paulo, en el festival Coquetel Molotov de Recife y en el CCBB Música. Performance.
Inspirada por el sonido UK de principios de los 90, la artista andaluza Dalila lleva a su público al corazón y el espíritu hedonista de las “raves”, con un directo nostálgico. Dalila traslada este sonido también a sus propias producciones, suavizando los ritmos con emotivas breakbaladas cantadas, como en su single Cieguita (ft. Tontimerweber) o en su primer trabajo Tempestad. En definitiva, música para llorar en la pista de baile.
Cierra el mes de julio el artista barcenés 80%BAUL, con un directo que mezcla postpunk, new wave, synth pop, ebm, italo, y new beat, testigo de que las subculturas no han muerto.
En Valencia fueron la base musical del mayor movimiento clubbing de España hasta la fecha, que pronto se extendió por todo Levante e interior y que inició en cierta medida este fenómeno en el país. Un ocio nocturno donde miles de jóvenes acudían los fines de semana a discotecas en lo que más tarde se denominó “Ruta del Bakalao”.
Con el paso de los años, muy lejos de quedar anticuados, se han convertido en estilos ya establecidos que cuentan actualmente con una legión de seguidores de todas las edades que disfrutan de una extensísima red internacional de clubs y festivales en esa onda. 80%BAUL, el proyecto en solitario de Raúl Paez forma parte de este circuito y representa muy bien su evolución.





Conciertos agosto
Abre los conciertos de agosto Cakes Da Killa, el rapero norteamericano que, junto a artistas como Mykki Blanco o Zebra Katz, ayudó a que el “queer rap” explotara en la escena LGBT neoyorquina. Trae hasta La Terraza Magnética la cultura “ballroom” con un directo que funde hip hop potentes y ritmos house.
La presencia de Cakes da Killa en la música y en los medios de comunicación ha abierto camino a la aceptación de artistas abiertamente homosexuales en el hip-hop, llevando la cultura ballroom de la ciudad de Nueva York al resto del mundo. Con su último disco, Svengali, añade otro hito a su discografía y abre un nuevo capítulo en la larga relación entre el hip-hop y la música house.
Ideograma cuenta con un directo influenciado por el “techno detroit”, la historia del barrio de Malasaña, cuna de la “club culture” madrileña. Por último, cierra la programación de conciertos la dj y productora Asmara, favorita en los clubes de Los Ángeles, miembro del colectivo Nguzunguzu y productora ejecutiva del último disco de Kelela.



El cine al aire libre de los sábados por la noche propone una mirada a los barrios periféricos desde el punto de vista de las mujeres protagonistas de ocho películas como “Mi vida loca”, de Allison Anders con las cholas de Ecko Park, que se proyecta en 35mm; las adolescentes de los suburbios de París en “Girlhood”, de Céline Sciamma; y al ritmo de reguetón en el Valparaíso “anti-postal” de Ema, de Pablo Larraín.
“¿Qué he hecho yo para merecer esto!”, de Pedro Almodóvar, y “Greener Grass”, de Jocelyn DeBoer y Dawn Luebbe, son el retrato de dos amas de casa opuestas pero ambas prisioneras de su hogar, una en el barrio de la Concepción de Madrid y la otra en los suburbios acomodados y plastificados de Estados Unidos.