Juana de Arintero: La Doncella Guerrera

Una novela basada en una historia real de la primera guerrera y soldado de España, llena de coraje y lucha, ambientada en el siglo XV

La Doncella Guerrera

Inspiradas en el amor por sus familias y el honor, las mujeres desafiaban todas las convenciones de la época. La Doncella Guerrera se basa en el romancero leonés que cuenta la historia de estas mujeres y la de Juana de Arintero. Se trata de una leyenda que comienza en Arintero en 1475. Tras la muerte de Enrique IV, un habitual domingo de enero el ejército de hombres es convocado a la guerra. Las tierras de Castilla se disputaban entre su única hija y los futuros Reyes Católicos, Isabel y Fernando. 

El desacuerdo del trono supuso en el reino una gran batalla. El conde de Arintero no gozaba del mejor estado de salud aquel domingo en el que recibió la noticia, que implicó su ausencia en el combate. Debido a ello, Juana, una de sus hijas y futura doncella guerrera, se comprometió a representar a su familia en la guerra adentrándose en una acontecimiento épico. 

Juana no solo debía luchar por la ansiada corona, sino además debía mantener su identidad confidencial bajo armaduras. Esta historia repleta de pasión e intriga redactada por Teresa Sagrera cuenta con el poder de cautivar a cualquier lector. Una novela de guerra escrita como un canto de paz.

«SI QUERÉIS SABER QUIÉN ES ESTE VALIENTE GUERRERO, QUITAD LAS ARMAS Y VERÉIS A LA DAMA DE ARINTERO».

La profesora y escritora Teresa Sagrera Bassa, autora de la novela, es parte del Centro de Estudios de Sant Pere de Vilamajor (CESPV) en el que tienen como principal propósito la conservación de la historia de las tradiciones del municipio en escrito. Otras de sus obras más destacadas son Conciencia d’una reina, la cual fue finalista del Premio Néstor Luján 2012 y Sal roja, escrita junto al autor Ramon Gasch. En cuanto novelas, la narradora cuenta con Pots comptar amb mi (2019), Cabells de gebre (2021) y su última, La Doncella Guerrera

«Desde  tiempo  inmemoriales,  los  conflictos bélicos se han considerado un espacio masculino, pero es bien sabido que las mujeres, de una u otra forma, han desempeñado un papel activo en ellos: como acompañantes, como soporte de la unidad familiar y, en algunas ocasiones, como guerreras.»

Teresa Sagrera Bassa