La nueva película protagonizada por Raúl Arévalo, Paz Vega y Joaquín Climent llega a los cines el día 10 de diciembre
Tras su debut con Zero y varios cortometrajes a sus espaldas, el director valenciano Iñaki Sánchez Arrieta, regresa a nuestras pantallas con su segundo largometraje, El Lodo. Una fuerte sequía castiga las vastas extensiones de arrozales en el Levante español. Con La Albufera de protagonista, Ricardo (Raúl Arévalo), un prestigioso biólogo, decide volver a sus raíces para cumplir una misión; proteger el paraje natural donde vivía de niño. Las medidas que debe tomar le enfrentarán radicalmente a los lugareños, que ven atacada su forma de vida y subsistencia, un enfrentamiento que tendrá consecuencias inesperadas. De la mano de su mujer, Claudia (Paz Vega) y de su hija Julia (Casas) afrontarán un pasado que aún les atormenta.
Con el pasado y el miedo como protagonistas, la nueva película trata la principal lucha entre el modo de vida tradicional, que viene representado por los vecinos del lugar, y el modo de vida más moderno y sostenible, representado por Ricardo (Arévalo). “Es una película con varias capas, que profundiza en los personajes y con conciencia del problema medio ambiental” señalaba el actor Joaquín Climent.
“La película, se sirve del conflicto medio ambiental. Quería hablar de las oscuridades de las personas y del miedo: de los conflictos que cada uno lleva dentro. El miedo es el que mueve la historia hacía delante; el miedo a perder, el miedo del protagonista a reconocer algo que le ocurrió en el pasado, el miedo del pueblo a perder su estatus, aunque sea precario, el miedo de la gente al cambio. Hemos querido hablar de eso y de la complejidad de encontrar una solución a los intereses medio ambientales y a los intereses económicos y personales” explicaba Iñaki.
La especial localización destaca siendo un lugar tan idílico como es La Albufera: “la luz que tiene, ese punto que es muy bello por el día pero que cuando cae la noche, tiene algo como de oscuro y de inquietante. El origen del proyecto fue más el decorado que no una historia, a partir de ese decorado fue como, voy a escribir una historia sobre algo que pueda pasar aquí”, señalaba el director. El Lodo convierte este paisaje en un espacio solitario y tenebroso que ahoga a sus personajes mientras se apoya en la música para aumenta la sensación de tensión del ambiente. “La decisión estética fue elegir una paleta de color donde primaran los pardos, los colores de La Albufera, también en el vestuario de ellos (los protagonistas), que estuvieran fundidos con el entorno. Intentamos dejar fuera otros colores que pertenecieran a otras historias, aquí primar los colores fríos, los tierra, los ocres…”.
Y Aunque Raúl Arévalo y Paz Vega sean los protagonistas de este thriller, al elenco se suman actores de la talla de Susi Sánchez y Roberto Álamo, cuyas apariciones son cortas, pero consiguen cautivar al espectador. Joaquín Climent, que interpreta al personaje de Eusebio, señala como, desde un primer momento, quedó maravillado con el guion: “Es un personaje de una inteligencia natural muy potente, de hecho, en su comunidad, es el referente, es el juez de paz dentro de su núcleo. Siempre ha sido el nexo de la gente con el poder, que en este caso lo hace Susi Sánchez. Es consciente de que hay que poner una solución al problema y tiene el nexo también, con Ricardo, que es el personaje de Raúl, que conoce desde la infancia. Es el tipo de políticos que nos harían falta”.
“¿Y por qué El Lodo?, ¿qué papel juega el lodo en la película?”, le preguntábamos al director valenciano Iñaki Sánchez: “El Lodo habla del lodo que nosotros tenemos dentro, habla de nuestras miserias, de las cosas de las que no nos gusta hablar y que tenemos dentro y que cada uno se gestiona como puede, y de como todas esas cosas nos obligan y nos llevan por caminos que tal vez no son los mejores, y que generan situaciones como en este caso. Situaciones de personajes a otros personajes y que van complicando las cosas”.
Q: ¿Con qué contra tiempos os encontrasteis?
Iñaki: Lo más llamativo fue la famosa Dana. Nosotros estábamos grabando en un sitio que durante unos meses al año se queda aislado, solo se llega a la casa de los protas por una carreterita, y lo demás es como si fuera una isla, está rodeada de agua por todas partes. Entonces, cuando vino la Dana, cayó una lluvia tan bestia que además nos pilló rodando y fue como; ¡vámonos de aquí que sino no salimos! Porque fue un diluvio…
Joaquín: Desaparecieron las carreteras…
Iñaki: Estuvimos un jueves y un viernes sin poder rodar, la suerte es que teníamos el fin de semana para poder recuperarlo. Estaban desaguando las compuertas, desaguando La Albufera…estuvieron tres días para bajar el nivel de todo lo que llovió. Los camiones se quedaron con todo el equipo dentro, con el agua por las ruedas ya subiendo y asustados por lo que iba a pasar. Era una situación bastante extrema.
Joaquín: (Entre risas) Y ya tres días después creo que fue, nos metieron con unos todo- terreno de ruedas grandes, y no veías la carretera, los conductores mantenían la referencia porque eran de allí, pero nosotros íbamos asustados…
Q: Siguiendo con el rodaje…
Iñaki: El rodaje en barcas fue bastante complicado también (entre risas). Tuvimos perro, tuvimos niña…pero la niña buenísima, era infalible.
Joaquín: La barca eso, que tienes una conversación en barca donde te estas intimando, y hay un motor… era toda una complicación, que se ve todo muy placido, pero fue muy complicado.
«El Lodo» llegará a los cines el próximo 10 de diciembre.