Diagrams: el pulso visual de la historia, la ciencia y el poder
En el corazón de Venecia, la Fondazione Prada presenta Diagrams, una exposición revolucionaria creada por el prestigioso estudio AMO/OMA de Rem Koolhaas, que transforma el concepto de visualización de datos en una experiencia intelectual y sensorial sin precedentes. Esta muestra única, que se exhibirá en el imponente palacio Ca’ Corner della Regina del 10 de mayo al 24 de noviembre de 2025, ofrece un recorrido impactante por más de 300 piezas que revelan el poder transformador del diagrama como herramienta universal de comunicación, análisis y manipulación. A través de documentos raros, imágenes digitales, mapas antiguos y representaciones contemporáneas, Diagrams desafía nuestra comprensión del conocimiento y reconfigura el vínculo entre ciencia, arte y pensamiento crítico.
A lo largo de los salones barrocos del palacio, la muestra despliega un conjunto de materiales sorprendentemente diversos. Desde ilustraciones científicas de siglos pasados hasta interfaces visuales recientes, el visitante se ve envuelto en un paisaje gráfico que traza la evolución de cómo los seres humanos han intentado entender su entorno.
Las piezas provienen de contextos geográficos muy distintos y abarcan disciplinas que van desde la astronomía hasta el diseño de moda. No hay una narrativa lineal; en su lugar, los contenidos se organizan en torno a cuestiones de actualidad, creando asociaciones inesperadas entre épocas, ideas y culturas.
Lo que hace particularmente rica esta experiencia es su enfoque conceptual: no se limita a mostrar gráficos como elementos técnicos, sino que revela su dimensión simbólica, emocional y política. El diagrama aparece como una forma de pensar visualmente, una herramienta que permite ordenar el caos o amplificar un mensaje. Se convierte en un lenguaje en sí mismo, con la capacidad de conectar mundos distintos sin necesidad de traducción. En cada sala, se siente cómo esta lógica visual ha sido clave en la construcción del conocimiento y también en su manipulación.
Rem Koolhaas, figura esencial en esta propuesta, sostiene que los diagramas han estado presentes en prácticamente todas las formas de civilización, desde expresiones prehistóricas hasta las más avanzadas tecnologías digitales. Más que una invención moderna, son parte del equipaje intelectual de la humanidad. Para él, lo fascinante de este formato es que puede adaptarse a cualquier medio disponible: piedra, papel, pantalla o incluso la arquitectura misma. Su versatilidad lo ha mantenido vigente como un mecanismo eficaz para educar, seducir o persuadir.
En este sentido, la exposición no busca generar una falsa sensación de neutralidad. Muy al contrario, insiste en que los diagramas son construcciones cargadas de intención. Aunque suelen presentarse como imágenes objetivas o racionales, en muchos casos encarnan visiones del mundo, valores culturales o estrategias ideológicas. La curaduría, al destacar este punto, invita a adoptar una mirada más crítica sobre las formas en que los datos son representados y cómo esas representaciones influyen en nuestras decisiones cotidianas.
La investigación detrás de este proyecto ha sido rigurosa y extensa. Además del equipo de AMO/OMA, destaca la participación de Giulio Margheri y de la historiadora Sietske Fransen, cuya labor permitió enlazar los materiales con marcos históricos complejos y poco explorados. Gracias a ese trabajo en profundidad, la muestra no se limita a exhibir artefactos interesantes: propone una reflexión coherente y ambiciosa sobre la visualización del saber a través del tiempo.
Uno de los aspectos más provocadores es cómo se pone en evidencia que el mismo recurso gráfico puede usarse tanto para aclarar como para manipular.
En tiempos donde las imágenes compiten por nuestra atención y los datos fluyen sin tregua, la capacidad de sintetizar información en una forma visualmente atractiva se vuelve un arma de doble filo. La exposición lo señala sin ambigüedades: lo que vemos como claro y directo puede ser también un disfraz de algo más complejo o sesgado.
Así, Diagrams se erige como un ejercicio de lucidez colectiva. No pretende dar respuestas definitivas, sino activar la curiosidad y el pensamiento crítico. Al recorrer sus salas, uno no solo observa: se cuestiona, duda, reinterpreta. Esa es su mayor virtud. En una época que exige nuevas formas de entender lo que sucede a nuestro alrededor, este proyecto nos recuerda que mirar con atención y con desconfianza saludable puede ser una forma de resistencia.
