El documental de la polivalente figura de la televisión arroja luz a su poco conocida vida privada
Dean Martin. Unos lo conocerán por tratarse de uno de los cómicos más reconocidos de los Estados Unidos en la época de los sesenta, otros por sus versiones de canciones conocidas del momento como Sway y Volare bajo el nombre de Dino Martini, quizá alguno por sus escarceos en los clubs nocturnos y por formar parte del Rat Pack junto a Sinatra, y probablemente muy pocos o casi ninguno que le conociese como el boxeador Kid Crocetti o un croupier cualquiera de un casino. La verdad es que ha tenido muchas vidas bajo muchos alias y todos ellos han contribuido a una persona enigmática que parece que tiene que contar mucho más de lo que hizo, incluso hoy en día.
La dualidad de un hombre famoso
Leonardo DiCaprio y Tom Donahue han decidido evitar las asociaciones obvias con esta figura para hablar de una influencia que se extendió tanto a actores como a cantantes y cómicos.
Amable, distinguido, alguien con el que se podía estar, pero un absoluto misterio fuera del escenario y las cámaras. Nadie le conocía a ciencia cierta. ¿Jugaba al golf con Jerry Lewis Frank Sinatra? Cualquier podría decir que acababa tan cansado de ellos como lo pasaba bien con sus swings. ¿Buscaba la fama en cualquier actuación en la que tomaba parte y se expresaba abiertamente en sus canciones y papeles? En su vida privada, era alguien solitario. Buscaba aislarse, como si quisiese conservar una llama que podía extinguirse con el contacto con la gente.
A partir del testimonio de algunas personas que le vieron en acción como la actriz Carol Burnett o el guionista Norman Leer, el documental de “Dean Martin: el rey del cool” nos dará esa pieza para poder desentrañar el rompecabezas que mostraba ser al ojo ajeno. Ya presente en la plataforma de Filmin, esta perla de producción permanece a la espera a que alguien la desentierre para escuchar lo que se tiene que decir sobre esta figura casi mítica de Hollywood.