Así es la cuarta edición de Artycapucines de Louis Vuitton
El cuarto capítulo de la colección de edición limitada Artycapucines de bolsos de Louis Vuitton viene cargada de colores y de una creatividad desenfrenada.
Son varios los artistas internacionales que han plasmado su talento en esta colección: Daniel Buren, Kennedy Yanko, Park Seo-Bo, Amélie Bertrand, Peter Marino y Ugo Rondinone. Han conseguido seguir la línea característica de los tres capítulos anteriores de Artycapucines: innovación, talento y creatividad.
Daniel Buren ha creado un diseño a doble cara. Se puede encontrar en cuatro colores diferentes: verde, amarillo, rojo y negro. La estructura comprende dos formas: el trapezoide, que es la silueta del cuerpo del bolso; y un círculo a rayas blancas y negras –muy características del artista– que componen el asa. Un modelo simétrico, cada lado de un color de piel Taurillon distinto, con un acabado pulido satinado, que contiene las siglas de la marca en el mismo color del bolso.
Kennedy Yanko nos sorprende con un modelo impreso en 3D con un efecto de desgaste y de óxido, acabado con una pátina especial y detalles dorados, que generan un efecto de curva y arrugado –todo esto realizado por expertos artesanos–. Se trata de un bolso simétrico cuya forma se inspira en una lámina de piel de pintura doblada. Es posiblemente el que más impresiona visualmente, pero también destaca por su versatilidad: al retirar el asa de cuero, se convierte en una cartera de mano, mientras que también se puede colocar una bandolera especial en un bolsillo de tipo sobre que se encuentra dentro del cuerpo del bolso.
Park Seo-Bo: «Un día, estaba admirando un valle cerca del monte Bandai. El valle estaba alineado con el sol, así que casi parecía de color rojo neón. El color era tan intenso que parecía estar mirando a una llama que me perseguiría hasta mi muerte. Ese momento me recordó que soy un mero ser frente a la inmensidad de la naturaleza». El artista coreano ha plasmado este momento en su bolso, junto a la ayuda de su nieto y diseñador Park Jifan. La piel de becerro del bolso comienza con un efecto de pincelada coup de pinceau; posteriormente, se le aplica una detallada inyección de goma en 3D, y se acaba mano a mano para crear una pátina profunda.
Amèlie Bertrand nos trae un bolso que, aparte de destacar por sus colores degradados, brilla en la oscuridad. Crea imágenes alucinatorias que transmiten veracidad y artificialidad. Los elementos fosforescentes del asa y la superficie absorben la luz del sol para cargarse e iluminarse por la noche. Además de los colores, destaca la cadena –junto con su silueta grabada en la piel– y dos flores de gran tamaño, con un efecto de sombra pintada en el cuerpo del bolso. En este modelo aparece el logotipo de Louis Vuitton con un efecto metálico rosado.
Peter Marino se ha inspirado en un baúl medieval que observó en un edificio del siglo XVI en la ciudad de Venecia. El cuerpo del está decorado con preciso mosaico de tiras cortadas a mano de piel de becerro, con 315 ligeras tachuelas. En el exterior contiene un exclusivo tipo de cierre de pestillo, como el que tenía el baúl. El asa es de piel, con detalles que lo asemejan a un látigo, trenzado y elaborado a mano.
Ugo Rondinone ha diseñado el bolso que llena de color a Artycapucines con elementos arquetípicos que son el payaso y el arcoíris. «Mi obra se encuadra en una observación de la naturaleza y su relación con la condición humana», así lo explica el artista. El patrón está bordado a mano con 15.000 pequeñas cuentas en cada bolso, que ha costado más de 100 horas de trabajo para cada pieza. Entre las casi 500 cuentas de cada diamante, hay flores impresas en 3D, similares a las del motivo Monogram de Louis Vuitton. El asa, hecha a mano de resina translúcida, está diseñada de tal manera que cuando le da la luz, los colores se proyectan en la solapa del bolso.
La colección vuelve a reflejar el compromiso de la Maison con la innovación y experiencia artesanal. Cada bolso de la cuarta colección de Artycapucines es una edición limitada de 200 unidades por cada modelo –50 por variación de color en los bolsos de Daniel Buren–.
