Casa Albets
La masía de la familia Albets, ubicada en el municipio de Lladurs, el Solsonés ha sido galardonada este año con la estrella verde Michelin. Se ha reconvertido en un hotel-restaurante totalmente ecológico y vegano, preocupado por el medio ambiente y la comodidad de sus huéspedes. Nos entrevistamos con Joel, uno de sus propietarios.
¿Quién está al frente de Casa Albets? ¿Y la cocina?
Mi mujer Megan y yo. De la cocina se encarga nuestra maravillosa chef, Cristina.
¿Cómo surgió la idea?
Después de conocernos, mi mujer me contó que tenía la casa, propiedad de su padre, y que llevaba muchos años en desuso. Dimos vueltas a la idea y al final decidimos de hacer un hotel. Al padre de Megan le hizo mucha ilusión porque la casa es parte de la familia desde el siglo XI.
¿Por qué un hotel vegano?
Ambos somos veganos desde hace mucho tiempo y nos interesa el ecologismo. Queríamos encontrar la forma más sostenible de vivir y el proyecto tenía que ser así porque nosotros somos así.
¿Cómo se dio al principio?
Al principio nos dimos a conocer dentro del mundillo vegano, pero por desgracia todavía hay pocos veganos. No era sostenible enfocarnos solo en este target, además de que no queríamos que solo fuese un hotel para veganos. Cuesta hacerse un hueco realmente. Era un reto abrirse al público que no fuese vegano porque no sabíamos si se iba a apreciar, pero vimos que la gente estaba muy contenta.
Pero conseguisteis sacarlo adelante…
Sí, los dos primeros años hemos estado perdiendo dinero y este 2020 iba a ser ya nuestro año, si no hubiese sido por el covid. Es una pena que el boom mediático de la estrella michelin no se pueda aprovechar por el tema de la pandemia.
¿Habéis mantenido algo de la historia original de la casa ?
Claro, la casa ha estado siempre en la familia, tienen mucha historia detrás. Creemos que interesante contarla y que la gente pueda conectar con un sitio cargado de memorias. Obviamente había que hacer una reforma pero queríamos mantener el aspecto general, así que contactamos con una pareja de arquitectos especializados en la restauración de masías, que querían resaltar y conservar los valores arquitectónicos originales.
Me he enterado de que vuestra última apuesta es el huerto ecológico, ¿Cómo surgió la idea?
Empecé a raíz del primer confinamiento, antes no había encontrado la ocasión. Llevaba tiempo queriendo hacerlo, además de que ya tenía algo de experiencia en este sentido y había estado en proyectos relacionados con la agricultura ecológica antes.
¿Se pueden probar entonces tus productos en el restaurante?
Sí, una parte de los productos que utilizamos en el restaurante son del huerto. Además, de cara a la primavera voy a ampliar la zona.
¿Ha influido el huerto en ganar la estrella Michelin verde?
La verdad es que no se cuales son los criterios, pero supongo que el autoabastecimiento ha tenido peso. Desde el inicio teníamos esa idea y el huerto es ir un paso más más allá.
¿Qué es el lo que más valoráis?
El poder obtenerlo todo de la zona. Prácticamente producimos nuestras propias verduras, y si no, le compramos también a un chico de por aquí.
¿Cómo funciona la caldera de biomasa?
Con una madera de la comarca, procesada, modificada y troceada para que se pueda utilizar de la mejor manera posible. Genera una combustión muy oxigenada que optimiza la quema.
¿Hay algún otro secreto que tenga el hotel?
Aparte de la casa tenemos una finca con bosque propio que aprovechamos siguiendo plan de explotación forestal con un criterio de sostenibilidad.
Aun así, para hacer una extracción sostenible no podemos depender únicamente de la madera que saquemos nosotros.
¿En qué utilizáis esta madera?
Hacemos los muebles de las habitaciones, construidos todos artesanalmente con madera de roble de la misma finca, hechos en Freixinet de Riner. En la explotación que te comento lo que se corta son pinos, pero de vez en cuando hay que hacer algún camino o claro y se cortan algunos robles.
Es curioso porque la madera se cortó en 2015 y ,por casualidades de la vida, los arquitectos un día nos hablaron de un hombre que hacen muebles aquí al lado. Gracias a él, nos hicieron los muebles de la madera que habían sacado de nuestro propio bosque años atrás.
Todo, excepto las bases de cama y butacas, está hecho con la materia prima de aquí.
¿Las camas también son ecológicas?
Los colchones están hechos con materiales 100% naturales y las sábanas son ecológicas. Es la segunda remesa, y se la compramos a un chico de la zona. Las almohadas también son de materiales naturales.
¿Entonces prácticamente todo es ecológico?
Sí, muchos productos de las habitaciones y los jabones también, de artesanos de Gerona.
¿Cómo ves el futuro?
Pues bueno… en navidades al final no vamos a abrir. Preferimos que se quede cerrado y que las cosas mejoren, que si no al final se alargan y es peor para todos.
La ecología ha sido una constante en el diseño de la rehabilitación de la masía en Hotel. La reforma, diseñada y dirigida por los arquitectos Anna Feu y Carles Godoy de Feu&Godoy Arquitectura , ha seguido criterios muy respetuosos con el estado original de la casa. Asimismo, Casa Albets goza de la máxima certificación de eficiencia energética.