‘Bowie taken by Duffy’ estará ahora hasta el 23 de julio en Madrid
El plazo para visitar la exposición de fotografía Bowie taken by Duffy queda ampliado. El 25 de junio iba a ser el último día para poder verla, pero su éxito ha motivado un retraso hasta el domingo 23 de julio.
Abierta al público desde el miércoles 15 de marzo, la exposición explora las colaboraciones entre los revolucionarios David Bowie y Brian Duffy, cantante y fotógrafo, respectivamente. Ambos británicos. La dupla colaboró entre agosto de 1972 y abril de 1980, marco de tiempo en el que Duffy fotografiaba a Bowie caracterizado como sus alter egos más reconocidos.
Y es que Bowie no se limitaba a cantar sobre el escenario, sino que llevaba a cabo una ‘performance‘ en la que se disfrazaba de forma excéntrica, siguiendo al pie de la letra el estilo del ‘glam’. Con estas prendas coloridas y llamativas, interpretaba personajes que parecían provenir de otros mundos. Ziggy Stardust o The Thin White Duke, son tan solo algunos ejemplos.
Esta propuesta tan explosiva en la época fue en parte fruto de la colaboración con Brian Duffy, un fotógrafo que había destacado en la moda capturando una imagen de las estrellas de la época diferente a la habitual (el actor Michael Caine, la modelo Jean Shrimpton, entre otros). Juntos, consiguieron algunas fotografías icónicas. La más famosa de ellas, Bowie maquillado y con el gran rayo rojo y azul en el rostro, fue de hecho un trabajo en común. Bowie tuvo la idea, pero apenas quería un rayo pequeño en una mejilla. Fue Duffy quien propuso hacerlo a lo grande.
Esta es una de tantas imágenes reconocibles que se pueden ver en la exposición, además de algunos homenajes posteriores -anuncios de Vodka que parodiaron portadas de discos e incluyeron a Bowie o las libras de Brixton, billetes extraoficiales que llegaron a usar más de 250 comercios en 2008-.
También se pueden ver cámaras, datos extra de hechos históricos y otras creaciones y grupos artísticos coetáneos a las fotografías, así como fotografías de otros personajes en las que también estuvo involucrado Duffy (Gold, por ejemplo, videoclip de la canción de Spandau Ballet rodado en la provincia de Sevilla).
Han pasado siete años de la muerte del cantante, pero queda claro que todavía es recordado con cariño. Solamente basta con ver que este 2023 ya ha habido la exposición Mick Rock. Puede que lo visto aquella exposición no llegue a captar todo lo que le hizo grande. Puede que esta, con el trabajo del también fallecido Duffy, tampoco lo consiga en su totalidad debido a su incalculable impacto, pero sin duda contienen momentos históricos de la música que han quedado para siempre. Los visitantes podrán verlo. Bowie, para la eternidad.
