En un hallazgo que podría redefinir nuestra comprensión de la vida marina y de la historia evolutiva de los océanos, una expedición liderada por el biólogo marino Alexis Chappuis y respaldada por la firma suiza de relojería Blancpain ha logrado documentar, por primera vez en la historia, un ejemplar vivo de Latimeria menadoensis, más conocido como celacanto indonesio, en su hábitat natural en el archipiélago de las Molucas, Indonesia.

El celacanto, apodado «el pez dinosaurio» o Raja Laut («Rey del Mar» en lengua local), es una de las criaturas más enigmáticas del planeta. Durante décadas se creyó extinto desde hace más de 70 millones de años, hasta que en 1938 un ejemplar fue descubierto en Sudáfrica, marcando uno de los mayores descubrimientos de la historia natural del siglo XX.
Desde entonces, solo se conocían avistamientos del celacanto del Océano Índico occidental (Latimeria chalumnae), pero esta expedición marca la primera vez que se documenta visualmente a su par indonesio en su entorno natural.


El hito científico ha sido posible gracias a los esfuerzos de UNSEEN Expeditions, liderados por Chappuis, y el apoyo continuo de Blancpain, casa relojera reconocida por su herencia en la relojería de buceo desde la creación del icónico Fifty Fathoms en 1953 y también por su compromiso con la conservación marina a través de su iniciativa Blancpain Ocean Commitment.
Para lograr este registro visual, el equipo debió enfrentarse a las exigencias extremas del buceo técnico con mezcla de gases a profundidades de hasta 145 metros, lo que implicó sesiones de descompresión de más de cinco horas. La hazaña se inscribe en una línea de proyectos de exploración marina ambiciosos y técnicamente complejos, como el que en 2013 llevó a Laurent Ballesta a estudiar por primera vez al celacanto africano en Sudáfrica.
El valor de la ciencia y la conservación
Este hallazgo es mucho más que una curiosidad evolutiva. Ambos celacantos —el africano y el indonesio— se encuentran en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN, catalogados como «en peligro crítico» y «vulnerable», respectivamente. Se trata de especies que no solo despiertan fascinación científica, sino que también sirven como catalizadores para la creación de Áreas Marinas Protegidas (AMP), que buscan preservar hábitats enteros y con ellos una diversidad biológica incalculable.


La colaboración entre Blancpain, universidades locales como Pattimura (Ambón) y Udayana (Bali) y socios científicos internacionales, no solo ha hecho posible este descubrimiento, sino que plantea una hoja de ruta para futuras acciones de conservación en zonas mesofóticas, una región submarina poco explorada, entre los 30 y 200 metros de profundidad, rica en biodiversidad y sumamente vulnerable.


El legado de una criatura milenaria
El celacanto no solo ha sobrevivido a los dinosaurios: con más de 400 millones de años de historia evolutiva, posee características fascinantes, como aletas lobuladas que se mueven como extremidades, un pulmón vestigial y una longevidad estimada de hasta 100 años. Incluso su reproducción es extraordinaria: las crías se desarrollan dentro del cuerpo de la madre durante casi cinco años antes de nacer vivas.

“Este descubrimiento pone en relieve la riqueza biológica de las Molucas del Norte y subraya la urgencia de seguir explorando y protegiendo estas zonas profundas del océano”, afirmó el doctor Gino Valentino Limmon, investigador de la Universidad de Pattimura y parte del equipo expedicionario.
Por su parte, el doctor Mark Erdmann, vicepresidente de Conservación Internacional para la región Asia-Pacífico, celebró la resolución de una duda científica de larga data: “El hecho de que se haya logrado mediante buceo profundo con trimix es aún más impresionante y abre la puerta a nuevas oportunidades de investigación”.
Mientras los detalles exactos del lugar del hallazgo permanecerán en reserva para garantizar la seguridad de la especie, el impacto de esta expedición ya es evidente: devuelve a la humanidad una parte olvidada de su historia natural y nos recuerda, con humildad, cuán vasto y desconocido sigue siendo el océano.
En palabras de Alexis Chappuis: “No le dijimos a Blancpain que íbamos a encontrar al celacanto. Les dijimos que exploraríamos sus posibles hábitats. Es cada vez más difícil encontrar socios que apoyen este tipo de proyectos a largo plazo”.

Blancpain: relojería al servicio del océano

Desde hace más de dos décadas, Blancpain ha apostado decididamente por el conocimiento y la preservación de los océanos. Con más de 40 expediciones científicas respaldadas y más de 4,7 millones de kilómetros cuadrados protegidos a través de su apoyo a las AMP, la firma ha sabido alinear su legado de excelencia técnica con un compromiso ambiental tangible.
En 2023, desarrolló el Fifty Fathoms Tech Gombessa, un reloj pensado específicamente para los requerimientos del buceo técnico de larga duración, cuyo nombre rinde homenaje al celacanto en la lengua local de Sudáfrica.